23/6/09

Crónica de una superpotencia que no fue

(...) Hace un corto siglo, Estados Unidos y la Argentina eran rivales. Ambos estaban montados en la primera ola de la globalización. Ambas eran naciones jóvenes y dinámicas con fértiles tierras cultivables y exportadores seguros. Ambos llevaban carne vacuna del Nuevo Mundo a las mesas de sus antepasados coloniales europeos. Antes de la Gran Depresión de la década del ‘30, la Argentina era una de las 10 economías más grandes del mundo. Los millones de italianos e irlandeses que emigraban de sus países huyendo de la pobreza a fines del siglo XIX se debatían entre dos alternativas: ¿Buenos Aires o Nueva York?. ¿La pampa o la pradera? (...)

En conclusión, sería acertado seguir apostando a que Estados Unidos encontrará el camino para salir de la crisis financiera y a que la Argentina continuará dañándose a si misma. De las dos grandes esperanzas del hemisferio occidental a fines del siglo XIX, una tuvo éxito y la otra se estancó en el siglo XX. Fue la historia y las decisiones, no el destino, lo que determinó cuál de las dos se convirtió en qué. Es la historia y las decisiones lo que determinará cuál de ellas será qué dentro de un siglo (...) Completo en
www.cronista.com

Otra versión de lo que hablábamos por acá desde un punto de vista mas crudo. En el clip de ahí abajo hay otra, probablemente mas esquemática pero también valiosa.


2 comentarios:

GABU dijo...

Dicen que las cosas por algo no son cuando parece que tendrìan que haber sido...

P.D.:Hace un tiempito ya habìa visto èste video y me indigna pensar y sentir cuan lejos estamos de aquel pasado...

Pero aunque suene utòpico todavìa quiero creer que podemos despertar y hacer una mejor realidad para todos!!

BESITO GRANDE VÌC

pau dijo...

Excelente el video.
La nota me parece bastante aburrida, pues se mantiene en la antigua línea de comparar USA con Argentina sin el adecuado enfoque. Groseramente, es como si compararam una sandía con un globo sólo porque tienen la misma forma y el mismo color!! No sorprende que el autor sea yanqui: siempre se equivocan cuando nos analizan porque, engañados por las apariencias, creen que somos europeos como ellos, no les cabe la forma de ser del mestizo americano que somos. Ignoran los 300 años de historia que teníamos acá en 1810, ni se imaginan porque ellos mismos jamás se se habían codeado con los indios, (más que codearse los habían molido a "codazos"). Pocahontas fue el único caso y la pobrecita murió en Londres, sin hijos.