4/9/07

Que loco, loco.

Hay muchas cosas que me hacen dudar muy enserio de mi discernimiento y de mi cordura. Un caso muy recurrente que experimento es la defensa idealista e irracional del socialismo por parte de cierta gente. Desafortunadamente muchos.

Ellos, sus sostenedores, tienen que recurrir a teorizaciones muy rebuscadas para argumentar su posición. Todo muy artificioso. Para encontrar ejemplos se les complica aun mas. Todo rebuscado. Se ven obligados a referirse a algún momento de algún país monárquico escandinavo o una idealización de Francia. Al mismo tiempo tienen frente a sus ojos decenas de ejemplos del éxito de las democracias republicanas capitalistas y no lo ven. No lo quieren ver. Prefieren imaginarse conspiraciones complicadísimas urdidas por gente muy mala diseñadas para hundir a los países revoltosos. Tambien tienden a revelar que en los países exitosos hay asesinos seriales, drogadictos y pirómanos. Como si no los hubiera en otros lugares.

Ciertamente no es una cuestión que pase por la racionalidad, por otra parte es muchísimo mas elegante manifestarse de “centre gauche” que ser un “salvaje neo-liberal”. Defendiendo al socialismo uno demuestra ser una persona sensible y creativa.

¿Para que decir la verdad si se puede decir algo mejor? (A. Calamaro)

8 comentarios:

María del Carmen dijo...

¿Sos chinchudo?

Victor dijo...

Si, un poco. Pero se me pasa rápido.

Ay Rocío... dijo...

Yo creo que por algo las ideolgías de ese tipo no surtieron éxito....

Simplemente a mi parecer....

Chinchudeli y todo.. me alegra su comentario cada vez qeu lo leo...

pau dijo...

Probá con estos ejercicios:
- Abrí tu mente: revisa los postulados.
- No creas todo lo que te dicen, sacá tus propias conclusiones.
- No seas maniqueo y simplista: siempre las cosas son más complicadas de lo que parecen.
- No seas chinchudo y soberbio mental, que ambas cosas estrechan el entendimiento.

No hace falta estar de acuerdo con el socialismo marxista, que suprime la propiedad privada apoyandose en un superestatismo para ver las ventajas culturales y económicas de socializar parte de la riqueza producida por los privados. De igual forma, no hace falta estar de acuerdo con los principios de la economía norteamericana para ver las ventajas del capitalismo.
Si te manejás con parámetros del siglo pasado, en términos de oposición antagónica excluyente te vas a freir los sesos para no entender el mundo moderno, que evoluciona hacia formas híbridas conciliando ventajas de distintos orígenes ideológicos.

Si querés un ejemplo, mirá las bases del Partido Demócrata Progresista

Saludos

Anónimo dijo...

FRAGMENTARIO

Todos hacemos guita gracias a la Sociedad. Hasta nuestros derechos individuales son un invento de la Sociedad, una convención. Es decir que si la Sociedad pensara que la mejor forma de distribuir la riqueza es obligar a los que más tienen a compartir con los demás, sobre todo para mejorar las posibilidades de éxito de los que menos tienen, eso sería algo tan legítimo como los derechos individuales. Las ideas de derechos de la comunidad, derechos de la especie, son ideas modernas (y creo que yanquis), que no tienen que ver con el estatismo.

El estatismo es una antigualla de la época de Tutnkamón que llegó al presente de la mano de las ideas Marx, que se equivocaron mal pensando que, por decreto, el Estado podría ocupar el lugar de la Sociedad y sería legítimo defensor de sus intereses. El Estado siguió estando en manos de elites rapaces e imorales que, como siempre ha sucedido, envilecieron aún en proporción con la concentración del poder. Y no defendieron los derechos de la Sociedad, la humillaron con limosnas.

Por ejemplo, una norma "socialista" pero no estatista es una ley de mecenazgo, mediante la cual las empresas pueden destinar parte del pago de impuestos a obras que distribuyen la riqueza (hacer escuelas y subsidiarlas o donar vacunación para niños). Si el Estado se limita a dictar la norma y a hacer que se cumpla en lugar de recaudar y hacerlo... ¿que me decís?

Puse entre comillas "socialista" porque, claro, nada de esto sería posible si creemos que Socialismo siempre va con mayúsculas, y se refiere a un Estado Obrero organizado con el monopolio de la fuerza pública, una sociedad sin clases y este tipo de utopías.

Si el único significado que aceptamos de "socialismo" es este, tendremos que encontrar una nueva palabra para describir aquellas ideas que combaten la inequidad sin dejar de creer en la democracia, la república y la economía de mercado. Antes se llamaba progresismo, pero, en este pais de fingimientos, esa palabra fue usurpada por los retroistas, para enmascarar su confusión con una palabra hop!

Saludos

Anónimo dijo...

Verso. Chicanas dialécticas para para no decir las cosas por su nombre. Si a los servicios sociales los quieren llamar "socialismo" no es mi problema. En los lugares donde se aplicaron "grados de socialismo" los perjuicios tuvieron una correlación positiva directa.

Anónimo dijo...

Es tu problema, m'hijo, porque sos vos el que no entiende y se viene loco descalificando al otro de versero o chicanero.

Si defenestrás al socialismo por confundirlo con estatismo, marxismo, comunismo, perdés la posiblidad de reconocer las virtudes que de hecho tiene, tanto en lo teórico como en lo práctico.

En lo teórico es más consistente que el pensamiento acotado a los derechos del individuo porque, evolutivamente, el bienestar del conjunto está por encima del bienestar individual. (Mirá la película "Una mente brillante", sobre el tipo que le encontró una forma matemática a este principio).

Desde el punto de vista práctico, una distribución estratégica de parte de la riqueza creada por los privados, permitiría no sólo controlar la pobreza extrema y la marginalidad, cuestiones básicas de derechos individuales que ya no deberían existir, sino también aprovechar mejor el capital humano del conjunto, que se ve desaprovechado y aún destruido en el sistema actual.

Si necesitas la expresión "servicios sociales" para que te quepa la noción de socialismo como horizonte, metele. Pero no podés decir que te parece mal que el Estado intente igualar las oportunidades de progreso en general, y de reconocer que tal cosa no va a surgir de la sola radicalización del liberalismo.

Anónimo dijo...

Socialismo es sinónimo de control gubernamental de las fuerzas de trabajo. A lo que se refieren no se cómo se llama pero no es socialismo, es apenas lo que debería hacer todo estado democrático, sea de la ideología que sea.